Para los que leen.
Para los que no.
Para los que ojean y comentan. Para los que sólo observan.
Para los perdidos que caminan por insustanciales senderos.
Para los que protestan y critican. Para los que me apoyan o acompañan.
Para los que me quieren. Para los que me odian o no me entiendan.
Para los que se sientan identificados. Para los que no.
Para los que dicen que me conocen. Para los que les han contado como soy y creen conocerme. Para los que si me conocen.
Para los imperturbables o circunspectos. Para los alborozados o risueños.
Para los melancólicos. Para los altivos o pedantes.
Para los afligidos. Para los alegres.
Para todos vosotros escribo.
Pero sobre todo para mí.
Israel Esteban